Es frecuente que las personas que padecen obesidad recurran a medicamentos con el fin de reducir su peso rápidamente. Los fármacos son recomendables en pacientes que presentan un IMC por encima de 30. En la actualidad, hay dos medicamentos que predominan en el mercado:
Sibutramina y Orlistat. Ambos son los únicos que han demostrado su eficacia y seguridad en estudios científicos.
El Orlistat conocido comercialmente como Xenical. Este medicamento actúa inhibiendo la enzima conocida como lipasa pancreática, la encargada de descomponer los triglicéridos en el intestino. Sin esta enzima, un porcentaje de los triglicéridos de la dieta no son transformados en ácidos grasos absorbibles y se excretan directamente sin digerirse. En simples palabras se puede decir que el Orlistat inhibe la absorción de las grasas.
Reductil o mejor dicho la Sibutramina funcionada reduciendo el apetito gracias a una acción farmacológica en los transmisores cerebrales.Su acción principal reside en que es un inhibidor del apetito, es decir un anorexígeno no anfetamínico. La sibutramina es un inhibidor de la recaptación de serotonina, dopamina y norepinefrina. Al evitar que estos neurotransmisores se recapten, se provoca una mayor acumulación de los mismo en el cerebro lo que produce como efecto la sensación de saciedad. Así disminuye el apetito del paciente tratado con sibutramina y se genera también un aumento del gasto de energía.
La Sibutramina sólo se administra cuando se trata de un caso de obesidad mórbida, donde el índice de masa corporal es mayor a 30 ó cuando es mayor a 27 pero se presentan complicaciones como diabetes y/o dislipidemia. Su uso se hace siempre bajo supervisión médica y como complemento de un plan dietario.
Hay que tener presente que la obesidad no es una alteración que pueda curarse milagrosamente, si no que más bien podríamos decir que puede controlarse. Es el médico quien ha de prescribir el tratamiento más adecuado al paciente, y además el individuo ha de ser consciente de que los pilares de la lucha contra la obesidad son el ejercicio físico y una dieta adecuada.