La melancolía
es un sueño aturdido
que golpea al oído
como una campana híbrida.
Secuestra una lágrima del pasado,
tal vez una imagen de tiempo desquiciado
que sobresalta al futuro del día,
en su resorte hay algo de alegría
que dibuja la silueta de una cándida sonrisa
en la añoranza donde el sentimiento
lleva en la palma una dolorida hoja de antaño
y en su envés vibra la delgada sangre con pasión.