¿Cómo has hecho para soportar todas mis tristezas?
Tú, testigo del infortunio de mi vida.
¿Cómo has hecho para estar conmigo cada noche en mis desvelos
Y recoger cada lágrima que brotan desde las puertas de mi alma
En donde estoy en el abismo de mi soledad,
Y aun en medio de la obscuridad de mis lamentos,
Permaneces junto a mí en una cama llena de melancolía?
Regreso cada noche con la congoja recogida durante mi día,
Me ves y solamente me dices tus palabras en silencio.
Te llevo hacia mi pecho donde una vez hubo un corazón con un amor,
Y comparto contigo el vació que siento,
Te abrazo y sólo puedo sentir la nada de este mundo.
Luego de abrazarte te pongo a mi costado,
Y te empiezo a abrir mi corazón,
Sabiendo confiadamente que tú no le dirás a nadie mi desdicha,
Te cuento mis penas, mis frustraciones y mis desilusiones,
Y tú te quedas con esa paz que yo necesito,
Así que te vuelvo a abrazar para poder robarte esa paz.
Nos acostamos y estás entre mis brazos.
Pero perdóname, porque te soy infiel cada noche,
Porque cuando te abrazo imagino que eres ella,
Y te abrazo más fuerte recordándola,
Recordando cómo una vez mis manos y mi pecho pudo sentir la felicidad.
Me duermo entre el recuerdo de mi pasado.
Sueño nuevamente con ella.
Soñando que ella está una vez más conmigo,
Soñando que me dice que me ama y que no puede vivir sin mi amor,
Soñando así sólo sueños producto de mis fantasías y de mis ilusiones.
Me despierto de mis más tristes sueños,
Y me doy cuenta de la verdadera infelicidad de mi realidad,
Existencia en la que tú no existe junto a mí,
Sino que está ella junto a mi lado.
Me levanto por las mañanas y te dejo recostada.
Tú disimulas que estás dormida,
Pero yo sé que me observas,
Y sé que me deseas que pueda encontrar la felicidad en este día,
Aunque eso implique que ya no vuelva contigo por las noches,
Pero estás dispuesta a perderme con tal de verme en la bonanza.
Gracias por estar allí en esos momentos en los que te necesito.
Gracias por no reprocharme nada
Y darme la soledad que necesito.
Y perdóname una vez más,
Por compartir contigo el sentimiento de dolor que siento.
Y no compartir contigo mi felicidad.
Perdóname…
Mi almohada.
Erick AlexMaru.