Traes toda la luz encendida del planeta
En tu pequeña mirada explosiva
Tu cuerpo de rocío
en el oráculo de tus ojos me dice
que soy tu sueño entre los sueños y
que el amor nos crece con la distancia y
la lejanía se hace lastre pesado.
Pero no pienses amor,
¡ Solo siente ¡
Nunca perdimos un resalto de auroras
Sometidos a las gramas verdes y fecundas.
Porque mis manos barrosas de único don
Han hecho un reloj atrasado en los nudos del tiempo.
Mientras de tu pecho ostentoso bajó la harina en ácimo
Del cereal molido y duplicado,
mi alma barda y terca
y mis dedos de amor fueron la braza del carbón.
¡ Ay amor ¡
que desparramada huele toda tu naturaleza
Rama y espiga, olivo, pan y masa
en los hornajes de las panaderías nuestras
Liberando aromas furiosos de crecidos nutrientes.
Como una loca lava que nunca existió
¡ Planta y trigo mío ¡
Dando la sagrada lección que el pan alimenta la boca
y la amapola de larva en beso nos nutre el alma.