Esto son dos marcianos que aterrizan en medio del desierto de Arizona. La temperatura resulta abrasadora, casi 40 grados. Dan unos pasos por el seco terreno del desierto y a poca distancia divisan una gasolinera. Sin dudarlo un momento, un par de marcianos se dirigen hacia allí.
Al llegar, uno de ellos se acerca a uno de los surtidores y le dice:
- Terrícola, llévanos ante tu líder.
Po
Evidentemente, nadie contestó. El marcianito, ya un poco cabreado, se gira hacia el otro extraterrestre y le dice:
- O este terrícola muestra un poco de respeto y me contesta o lo fulmino.
A lo que el otro responde:
- Vale, mientras tanto yo me alejo y voy a inspeccionar la carretera.
Así lo hacen. Tan pronto el otro marciano llega a la carretera, que pasaba a unos 300 metros, el que estaba con el surtidor se vuelve y dice ya con voz de cabreado:
- Terrícola, llévanos de una vez ante tu líder.r supuesto no hubo respuesta. El marciano algo extrañado se mira con su colega y vuelve a espetar: