El término electricidad deriva del Griego "electrón", que significa "ámbar" (el filósofo Griego Tales de Mileto, se dió cuenta de que al frotar una varilla de ámbar con lana o piel, se creaba una atracción hacia otros cuerpos en la vecindad, e incluso se producían chispas). Este término se aplica a toda la variedad de fenómenos resultantes de la presencia y flujo de una corriente eléctrica. Ahora si, para explicar adecuadamente la mayoría de los fenómenos asociados además se debe incluir al magnetismo, lo que lleva al estudio del electromagnetismo; de esta manera podemos entender los campos magnéticos, los rayos que tanto destacan en las tormentas, y toda la gama de aplicaciones industriales que conocemos en la actualidad.