Yo tenía una visión diferente de este sentimiento,
Que el amor se distinguía por lo bello de la vida,
Pero es absurdo todo lo creído,
Ya que el dolor es lo que predomina.
Te demuestro lo que soy,
Pero no te basta, me tratas mal y ahí sigo,
Siempre detrás de ti como un mendigo,
Que se muere por el brillo de tus ojos.
Aquel brillo que me ciega,
Y que es la causante de ver todo distinto,
Ya que todo lo veo como tus ojos
Lo ven.
Tus labios que son la fuente del néctar que necesito,
Que me llenan de inspiración,
Ilustrándote en estas líneas como la musa, que
Tiene en sus manos mi corazón.
Solo te pido Diosa mía, me valores y aprecies
Lo que soy, porque otro mendigo como yo
No encontraras.