Queso blanco: 500 g
Bizcochuelos: 2 Discos
Azúcar: 150 g
Claras: 3 Unidades
Queso crema : 500 g
Esencia de vainilla: 1 cdita.
Gelatina sin sabor: 15 g
- Hidrate la gelatina con un poco de agua y disuelva sobre baño María. - En un bowl disponga el queso crema, el azúcar y la esencia de vainilla. - Incorpore la gelatina previamente hidratada mezclando rápidamente. - Integre las claras batidas a nieve en forma suave y envolvente. - Disponga una banda de papel acetato sobre los bordes internos de un aro metálico de 20 cm de diámetro. - En la base del aro coloque un disco de bizcochuelo y encima una cantidad de la mezcla de queso blanco.
- Repita la operación completando la capacidad del molde. - Lleve a la heladera durante 4 horas a 6 horas antes de servir.
Pueden servir con una salsa de frutillas o frutos rojos adpta.