En Semana Santa, vigilancia a tope en carreteras

Cada año en Semana Santa se prepara una campaña destinada únicamente a los conductores. En ella, la labor de la Guardia Civil y otros agentes de seguridad ha de ser impecable, ya que en gran medida de sus actividades depende la seguridad ciudadana. No es de extrañar que en Semana Santa se formen colas kilométricas si tenemos en cuenta que la mayoría de las personas la aprovechan para pasar unas minivacaciones alejadas de todo aquello que tiene que ver con su rutina diaria. Así pues, en estos casos, es imprescindible que ciudadanos y personal de seguridad del Estado cooperen en una fecha que todos los años se suman bastantes víctimas mortales causadas por accidentes de tráfico.

La Dirección General de Tráfico ha contabilizado hasta el momento 32 fallecidos en accidentes de tráfico durante esta Semana Santa, por lo que quizá, además de Guardias Civiles, debería haber otro tipo de estrategia que sirviera a los conductores para estar atento al volante, para respetar la velocidad, así como la distancia de seguridad y otras muchas señales de tráfico que muchas veces se pasan por alto sin saber el riesgo que ello conllevaría.

En las academias de Guardia Civil o en las empresas de seguridad privada se podría formar a los ciudadanos mediante cursos o algo así para que estos sean conscientes de los peligros de una mala conducción. Y es que por mal acto al volante no se entiende solamente el hecho de que no se respete la velocidad; cualquier distracción como el uso de teléfonos mientras se conduce, así como conducir bajo los efectos del alcohol y otras drogas es considerado de la misma manera una irresponsabilidad tanto para su seguridad como para la seguridad de los pasajeros que viajan con uno.

En definitiva, dado el elevado número de víctimas mortales en las carreteras en fechas tan señaladas como esta, lo mejor es que todos colaboremos poniendo nuestro granito de arena. ¿Acaso no es lo mejor para todos?