Andar en esos días en que te da lo mismo la persona que te gusta. Te da lo mismo si te habla o no. Te da lo mismo si está con otra persona. Andar en esos días donde la sensibilidad no existe para ti. Esos días en que te crees indestructible y que crees que no eres apto para amar ni ser amado. Esos días de reflexiones infinitas que te abren la mente a la realidad y acabas siendo indiferente .